"No será difícil congregar a 4.000 parados. Hay donde elegir. Exactamente 4.100.073, según los datos de diciembre. Y se les convoca para lo de todos los meses: hacer cola. Una muy larga, de casi cinco kilómetros. Los que separan el Congreso de los Diputados y el Palacio de La Moncloa. «Además, invitamos a sumarse a otros colectivos como los afectados por abusos bancarios, empresarios honestos que sufren impagos por parte de las administraciones, y afectados en general por los efectos de una crisis económica de la que no somos responsables», declaraba el pasado 12 de enero a ABC, Luis Fernández, presidente de la Asociación Nacional de Desempleados (Adesorg), convocante de tan singular movilización. Que no pudo cumplir el titular de su propaganda:
"Solo 300 personas secundan la convocatoria y, a mediodía, no habían recorrido más que los metros que separan la plaza de Neptuno de la mitad del paseo de Recoletos de Madrid" (informaba ayer 24 de enero el ABC).
Apenas cien personas han acudido a la cola de desempleados convocada hoy en Madrid, informaba El Mundo en su edicion on line, que días antes al igual que el ABC había publicitado la convocatoria- .
La indignación por el escaso éxito de la convocatoria se palpaba entre los participantes. Indignación contra el jefe del Ejecutivo y los partidos políticos por no hacer nada por los desempleados; contra los sindicatos, por no haberles apoyado y contra los medios de comunicación, por no haber difundido la iniciativa.
Esto escribía El Mundo tirando piedras contra su tejado.
