"En las primeras semanas de este Gobierno, una auditoría descubrió un agujero negro de 22.000 millones de libras (26.000 millones de euros) en las finanzas públicas. Esto significa que hemos tenido que tomar decisiones difíciles, como la verificación de los medios de vida para el pago del combustible de invierno. Nuestro presupuesto en octubre será difícil", reconoce el primer ministro, el laborista Keir Stamer, que asumió el cargo el pasado 5 de julio.
Se crea el Fondo Nacional de Riqueza
El crecimiento es la prioridad número uno del nuevo gobierno. Con este fin se ha creado el Fondo Nacional de Riqueza. Es un fondo de inversión de propiedad pública que ayudará a atraer inversiones, estabilizar la economía y crear riqueza para las generaciones futuras. Además, ayudará a desbloquear la inversión privada en el Reino Unido invirtiendo directamente en industrias nuevas y en crecimiento, y a crear miles de puestos de trabajo en industrias de energía limpia.
Bajo la batuta de Keir Stamer se prepara una legislación que garantice que nadie pueda jugar a la ligera con las finanzas públicas. Un nuevo proyecto de ley fortalecerá el papel de la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria, lo que significa que los anuncios fiscales importantes deben ser examinados adecuadamente y que el dinero de los contribuyentes debe ser respetado.
"Prohibiremos los contratos explotadores de cero horas, acabaremos con los despidos y las recontrataciones e introduciremos derechos laborales básicos desde el primer día. Y estamos cambiando la forma en que se establece el salario mínimo para que esté en línea con el costo de vida, en un intento de poner más dinero en los bolsillos de los trabajadores", subraya el primer ministro.