domingo, 21 de noviembre de 2010

El peso de las palabras

Las palabras caen muertas de la boca del presidente. Los ciudadanos están tan acostumbrados a escucharle que ya traducen de sus labios promesas incumplidas. Hoy (21 de noviembre) ha vuelto a las andadas en un diario nacional. El ciudadano común pasa página (más de lo mismo) y se pone a hacer el crucigrama.


   Lo cierto es que la cola del INEM se alarga, más clases medias acuden a los comedores sociales y las promesas incumplidas (como el pomposo titulo que iba a dar a las amas de casa para reconocer su situación de trabajadoras la ex vicepresidenta De La Vega) le van sepultando.

     El subsidio no ayuda a encontrar empleo, al revés desincentiva al desempleado que opta por tumbarse en el sofá y esperar tiempos mejores. El periodista le pregunta al presidente, sabiéndole en jaque mate. Este responde cansinamente sin transmitir un mínimo de ilusión. Al revés cabreando al común de los mortales, cuando el citado diario titula: "Voy a convocar a las 25 grandes empresas del país para acelerar la recuperación". ¿Por qué no lo hizo antes?...

El toque de corneta llega tarde. La tropa está soliviantada.